Raymond Waydelich

"Sin título" serigrafía y collage de Raymond E. Waydelich de "Kinderstern"

1989

Nacido en Estrasburgo en 1938, el artista Raymond E. Waydelich sigue viviendo cerca del corazón de esa metrópoli alsaciana. Incluso antes de que él y sus obras empezaran a viajar por rincones lejanos del mundo, Raymond era muy conocido en su país natal. Ya sea como pianista, cantante o creador de los Happenings de los años 70, o como artista de renombre de la actualidad, Raymond siempre se ha encontrado en el pulso de la cultura alsaciana contemporánea. Sus fabulosas creaciones, tanto pintadas como esculpidas, han encontrado hogar en casas de toda la región. Incluso puedes descubrir su presencia artística en un buen restaurante alsaciano en las fantasiosas bestias de su creación que decoran el menú o sostienen las velas. Tras estudiar en Estrasburgo y París, el joven Waydelich se abrió camino por el norte de África como fotógrafo itinerante. Allí descubrió su fascinación por la arqueología, que desde entonces aparece y reaparece en su obra como "la arqueología del futuro". Coleccionista insaciable de todo tipo de objetos, Raymond desmonta y vuelve a montar, pinta, conserva y documenta. Sus obras pueden ser bidimensionales o escultóricas. En ellos encontramos el mundo y sus contenidos reunidos como las cartas de una baraja, luego barajadas y vueltas a repartir en nuevas y fascinantes yuxtaposiciones. Incluso las obras más serias de Raymond dan testimonio de su alegría, ingenio y poesía. En el curso de la recopilación, llegó a sus manos un retrato fotográfico de Lydia Jacob, una costurera que vivió en Estrasburgo a finales del siglo XIX. Su nombre y los restos de su historia se convirtieron en el impulso originario de un ciclo continuado de obras, la "Historia de Lydia Jacob", en la que Raymond lleva trabajando desde 1973. ¿Podría decirse que se convirtió en su ánima? El artista dice: "¿Lydia Jacob? C'est moi". En 1978, la obra de Raymond se expuso en la Bienal de Venecia. Siguieron exposiciones en París, Nueva York y Tokio. Sus premiados cuadros, collages, objetos e instalaciones siguen viéndose en Europa y fuera de ella. Las Tarjetas LYDIA JACOB STORY ponen en manos del espectador una exposición privada para disfrutar en casa. Raymond E. Waydelich invita a sus fans, tanto a los nuevos como a los antiguos, a coger una carta y adentrarse en su universo y en el de Lydia Jacob.