Edgar Degas

Bailarina abrochando el tirante de su corpiño - Edgar Degas, bronce fundido por

siglo XX

Edgar Degas, nacido Hilaire-Germain-Edgar De Gas en París en 1834, era el mayor de los cinco hijos de Célestine Musson De Gas, criolla de Nueva Orleans, y Augustin De Gas, banquero. Degas comenzó sus estudios a los once años, matriculándose en el Lycée Louis-le-Grand, pero tras la muerte de su madre cuando tenía trece años, su padre y su abuelo se convirtieron en sus principales influencias durante el resto de su juventud.

Al graduarse en el Liceo en 1853, a los 18 años, se inscribió como copista en el Museo del Louvre , pero su padre esperaba que estudiara derecho. Degas se matriculó en la Facultad de Derecho de la Universidad de París, en noviembre de 1853, pero se esforzó poco en sus estudios. En 1855, Degas conoció a Jean-Auguste-Dominique Ingres, cuyo consejo nunca olvidó: "Dibuja líneas, joven, y aún más líneas, tanto del natural como de memoria, y llegarás a ser un buen artista". En abril de ese año, Degas fue admitido en la École des Beaux-Arts.

Prueba de la educación clásica de Degas es su primer cuadro, Jóvenes espartanos ejercitándose (hacia 1860; National Gallery, Londres), realizado cuando aún no había cumplido los veinte años. Después de 1865, cuando el Salón aceptó su cuadro de historia Las desventuras de la ciudad de Orleans (Museo de Orsay, París), Degas no volvió a pintar Temas académicos, centrando su atención en escenas de la vida moderna. Empezó a pintar escenas de actividades de ocio urbano, como carreras de caballos y, después de 1870 aproximadamente, de cantantes de café-concierto y bailarinas de ballet. El interés de Degas por las bailarinas de ballet se intensificó en la década de 1870, y llegó a producir aproximadamente 1.500 obras sobre el tema. No se trata de retratos tradicionales, sino de estudios que abordan el movimiento del cuerpo humano, explorando la fisicalidad y la disciplina de los bailarines mediante el uso de posturas contorsionadas y puntos de vista inesperados.

Tras la apertura del comercio con Japón en 1854, muchos artistas franceses, entre ellos Degas, se vieron cada vez más influidos por las estampas japonesas . Degas abstrajo de estos grabados sus inventivas composiciones y puntos de vista, sobre todo en su uso del recorte y la asimetría [Bailarinas practicando en el bar (1877); Bailarinas, rosa y verde (ca. 1890)]. También observó cómo los manieristas italianos del siglo XVI enmarcaban de forma similar a sus sujetos, a veces cortando parte de una figura.

Degas se interesó por una amplia gama de medios, como el grabado, el monotipo y la fotografía. Antes de 1880, solía utilizar óleos para sus obras terminadas, pero a partir de 1875 empezó a utilizar pasteles con más frecuencia, incluso en obras terminadas como Retratos en la Bolsa (1876). Presentó un conjunto de desnudos, todos ellos al pastel, a la exposición final Impressionist de 1886; entre ellos se encontraba Mujer bañándose en una bañera poco profunda (1885). Las figuras de estos pasteles fueron criticadas por sus poses desgarbadas.

A finales de la década de 1880, la vista de Degas había empezado a fallar, quizá como consecuencia de una herida sufrida durante su servicio en la defensa de París durante la guerra franco-prusiana de 1870-71. Después se dedicó casi exclusivamente a bailarinas y desnudos, y cada vez más a la escultura. Degas siguió trabajando hasta 1912, cuando se vio obligado a abandonar el taller de Montmartre en el que había trabajado durante más de veinte años. Murió cinco años después, en 1917, a la edad de ochenta y tres años.

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(Biografía facilitada por Galería Stern Pissarro)