Simone Cantarini

Estudios para el Juicio de Salomón, dibujo a doble cara de Simone Cantarini

hacia 1643-1648

Simone Cantarini nació en Pesaro en abril de 1612, entonces parte del Estado Pontificio, y fue bautizado el 12 de abril siguiente. Su trayectoria formativa siguió varias etapas en las Marcas, entre las que recordamos la guía del maestro Giovan Giacomo Pandolfi, además de la influencia en su primera fase creativa de la pintura manierista tardía de las Marcas, de la corriente caravaggesca de Orazio Gentileschi y Giovanni Francesco Guerrieri, para llegar a una fase artística que sigue la influencia de Barocci y Guido Reni. Su educación no fue inmune a los elementos naturalistas, que a partir de 1640 se añadieron a los conocimientos clásicos, transformando a Cantarini en un "petit-maître" de gran sensibilidad cultural y estilística. Sus estancias en Venecia, en el taller del maestro Claudio Ridolfi, y la de cuatro años (1635-1639) en Bolonia, en el taller de Guido Reni, fueron fundamentales para su perfeccionamiento. Sus obras más significativas fueron las relacionadas con el periodo boloñés, baste mencionar la Inmaculada Concepción y los Santos, El Descanso en Egipto, la Transfiguración y el Loth con sus hijas, todas ellas del cuatrienio boloñés. Le siguieron algunas obras realizadas en Roma durante una breve estancia, entre ellas el Milagro del tullido y la Salomè recibiendo la cabeza del Bautista expuesta en Cesena en 2010. Hacia 1641, Cantarini permaneció en Roma, donde se dedicó principalmente a la escultura antigua y al estudio de las obras de Rafael. Inmediatamente después de la muerte de Reni (1642), Cantarini regresó a Bolonia, donde creó obras de gran calidad, como la Adoración de los Magos, y se mantuvo activo en los últimos años de su vida. La muerte de Cantarini se produjo repentinamente, y a este respecto la información histórica parece contradictoria e incierta: mientras que, según algunas fuentes, murió en Verona en 1648 a manos del duque de Mantua por no haber entregado una obra, según otras habría sido asesinado por un pintor mantuano tras una violenta disputa. La pintura de Cantarini se caracterizó por un estilo peculiar, desde la acentuada búsqueda de efectos pictóricos, pasando por el poder sugestivo de los colores o las imágenes, hasta los colores graduados y las innovadoras poses de las figuras. De considerable valor y originalidad, la producción gráfica de aguafuertes, que cuenta con una cuarentena de temas (37 catalogados) a veces tomados de pasajes pictóricos más logrados. Producción gráfica que atestigua el interés inicial del pintor de Pesaro por la obra grabada de Federico Barocci y Guido Reni, de quienes es fuertemente deudor, para luego liberarse de éstos en las obras de madurez, con temas y composiciones que se caracterizan por una mayor autonomía expresiva y por una marcada calidad del signo. Lorenzo Pasinelli, Giulio Cesare Milani, Giovanni Peruzzini, Girolamo Rossi, Giovanni Maria Luffoli, Giovanni Venanzi y Flaminio Torre fueron algunos de sus alumnos.