Joseph Drapell

"En memoria de Clement Greenberg" - acrílico abstracto colorista y empastado sobre lienzo

1984

Joseph Drapell nació en la pequeña ciudad de Humpolec (cerca de Praga) ocupada por los alemanes (y más tarde por los soviéticos) en 1940. Sus padres educaron a sus tres hijos para que no creyeran en la propaganda oficial de los regímenes de ocupación. Al igual que el novelista checo Milan Kundera, Drapell sentía que la vida estaba en otra parte. Drapell escapó de su país natal a la primera oportunidad, a los veinticinco años, para desarrollar su arte en el Oeste libre. Aterrizó en Halifax en 1966, agradecido a Canadá por aceptarle. Drapell adoptó una isla (B-109) de la bahía de Georgia como su nuevo hogar espiritual. La isla ha inspirado (directa o indirectamente) todos sus desarrollos artísticos maduros hasta la fecha. El objetivo de Drapell era contribuir al arte de la pintura, más que simplemente ganarse la vida como artista. Entre 1968 y 1970, estudió con varios artistas y profesores visitantes en la Academia de Arte Cranbrook de Michigan. Aquí es donde empezó a desarrollar su técnica de compresión como respuesta a las pinturas de Morris Louis. Se instaló en Toronto en 1970. Drapell recorría las calles de Nueva York con un rollo de cuadros de gran tamaño, hasta que fue descubierto por la galería Robert Elkon de la avenida Madison. Tras tres exposiciones allí (y varias en Toronto, donde fue descubierto por Jared Sable, de la Galería Dunkelman), Drapell logró su primer avance artístico en 1974 con las Pinturas del Gran Espíritu. Joseph divide su tiempo entre Toronto y Georgian Bay (lago Hurón).