Lukasz Olek

En el límite

2019

"¿Le gusta perderse a propósito? Me encanta. Siempre prefiero las carreteras locales a la autopista, y suelen llevarme a los lugares más interesantes. Normalmente, los paisajes que pinto cobran vida como resultado de perderme literalmente. Allí, en el extremo del mapa, en paz y soledad, puedo reflexionar sobre el mundo circundante. Y luego, de vuelta al estudio, busco la forma de transferir mis impresiones al lienzo. Siempre es mi objetivo primordial: impregnar el cuadro de las emociones, las formas, los colores o, a veces, incluso las secuelas que ese lugar había dejado en mí. Cuando creo, me gusta perderme en diversos caminos, buscando y probando nuevos medios, formas y técnicas. A veces, de ese caos momentáneo surgen cosas que se oponen a los paisajes tranquilizadores que me han inspirado. Aparecen demonios surrealistas que habitan en la mayoría de nosotros, bajo la piel o en lo más profundo de nuestro interior. Veo el arte como un camino que me lleva a alguna parte. Ese camino es mi meditación y una forma de alcanzar la paz. Espero que nunca termine porque siempre debe haber algo más que merezca la pena descubrir".