Arte de Gil Bruvel

Nacido en Sydney (Australia) en 1959, Gil Bruvel tenía padres franceses que se trasladaron al sur de Francia cuando él tenía cuatro años. Mientras tomaba clases de dibujo a los nueve años y aprendía nociones básicas de escultura, Bruvel tomó la decisión de dedicar su vida a crear arte. Empezó a trabajar con pintura al óleo a los 12 años, y el entorno local tuvo una influencia enorme y duradera en su paleta: se inspiró en la luz y los paisajes de esta región, que le proporcionaron colores luminosos que sigue utilizando hoy en día. 

El padre de Bruvel, ebanista, introdujo al artista en ciernes en el funcionamiento interno de un taller de madera, incluido el diseño de muebles, su función práctica y todos los aspectos de la elaboración artesanal de cada pieza. Llevándose consigo estos conocimientos y experiencia, Bruvel empezó a estudiar en un taller de restauración de arte en 1974, y pasó los tres años siguientes aprendiendo las técnicas de los maestros antiguos y modernos de las bellas artes. Posteriormente, instaló su taller en Saint-Rémy-de-Provence, donde trabajó hasta 1986, año en que se trasladó por primera vez a Estados Unidos, donde fijó su residencia permanente en 1990. En esa época, empezó a experimentar más con esculturas en bronce, técnicas mixtas y modelado digital, y siguió aprendiendo sobre los procesos creativos en la expresión artística. Actualmente crea arte funcional, esculturas y pinturas. Gil Bruvel expone su obra desde 1974 en diversos lugares del mundo, como Francia, Mónaco, Inglaterra, Dinamarca, Países Bajos, Hungría, Japón, Singapur, Nueva York, Florida, Colorado, Nuevo México, Arizona, California y Hawai.