Pinturas de Leila McConnell

Leila McConnell nació en 1927 en Los Ángeles, California. Su familia se trasladó a Houston cuando ella tenía seis años y, tras graduarse en el instituto, se matriculó en el Rice Institute (ahora Rice University). En aquella época, Rice no tenía departamento de arquitectura, pero McConnell buscó inspiración en el emblemático profesor James Chillman. Tras licenciarse en Rice, continuó sus estudios de arte en la Escuela del Museo (ahora Escuela Glassell) del Museo de Bellas Artes de Houston. En el verano de 1949, asistió a la Escuela de Bellas Artes de San Francisco y tuvo la suerte de estudiar con Mark Rothko. Tras sus clases con Rothko, empezó a pintar obras más abstractas. En 1956 se casó con el también artista Henri Gadbois.

Al darse cuenta de que tenía una imaginación muy viva, McConnell se embarcó en un viaje a Europa en 1960. Los edificios de estuco de Italia influyeron mucho en su visión y provocaron un cambio en sus pinturas. Sus colores se volvieron suaves y difuminados, a menudo brumosos y representando un sol o una luna, lo que hizo que la artista considerara muchas de sus obras "pinturas del cielo". En 1976, McConnell empezó a crear collages de papel, una distracción de sus obras pintadas. Aunque pequeños, sus collages influyeron en la forma en que McConnell creaba sus cuadros: sus bordes se volvieron más duros, mezclados con la bruma de sus cielos, y sus composiciones se volvieron más simétricas. McConnell sigue pintando con su estilo único y desarrollando su obra de piezas "celestes".