Pinturas de Luigi Bazzani

Luigi Bazzani nació en Bolonia, donde estudió en la Academia de Bellas Artes. Sus primeros pasos en el mundo artístico los dio como escenógrafo del teatro municipal de Bolonia en 1857, en notable colaboración con Tito Azzolini y Francesco Bertolotti. Viajó a Francia y Alemania para perfeccionar su arte. En 1861 se instaló en Roma, donde trabajó como decorador, paisajista y escenógrafo para la Ópera. Trabajó con Elena Fracassini-Serafini en varios diseños de interiores hasta 1868. Se distinguió igualmente con sus pinturas religiosas durante la Exposición Romana de Arte Católico de 1870, en la que se le concedió una medalla de estímulo. El papa Pío IX llegó a encargarle la decoración de la basílica de San Lorenzo. Pintó frescos para numerosos edificios públicos y privados, como el vestíbulo del Palacio de Justicia de Roma. Hacia 1883, expuso sucesivamente cuadros de arquitectura pompeyana en Roma, Mónaco, Berlín y Turín. Cada una de estas composiciones de estudiada perspectiva y contenido teatral era de la mejor calidad. Estudió la arquitectura pompeyana, que ilustró con precisión, como en su serie de acuarelas pintadas en 1891 o los cuadros que realizó en 1900, entre ellos La casa del poeta trágico en Pompeya. Cada una de sus representaciones de la vida pompeyana está minuciosamente investigada, lo que confiere a su obra un valor casi histórico.