Thorsten Brinkmann Fotografía de bodegones

Thorsten Brinkmann nació en Herne (Alemania) en 1971. Estudió Comunicación Visual en la Kunsthochschule de Kassel y Bellas Artes en la Hochschule für Bildende Künste de Hamburgo. Brinkmann es conocido internacionalmente por sus retratos y bodegones fotográficos poco convencionales, presentados recientemente en el artículo de T: The New York Times Style Magazine, "Witty Photos That Play With Centuries-Old Artistic Tradition" (Septiembre de 2015). Brinkmann ha realizado exposiciones individuales en Bélgica, Alemania y México. Su obra está representada en museos de toda Europa y fue incluida en Beyond Borders, The Fifth Beaufort Triennial, Bélgica (2015) y Dress Codes: The Third ICP Triennial of Photography and Video, International Center for Photography, Nueva York (2009). Tras su residencia de 2012 en el Museo Andy Warhol de Pittsburgh (Pensilvania), Brinkmann emprendió La Hütte Royal, un proyecto de instalación de un año de duración consistente en transformar una casa en ruinas de la zona de Troy Hill, en Pittsburgh, en una obra de arte permanente. Thorsten Brinkmann, autoproclamado serialsammlerti ("coleccionista en serie"), guarda todo lo que le llama la atención mientras rebusca entre los objetos rotos y desechados que se encuentran en el purgatorio de las estanterías de las tiendas de segunda mano. Brinkmann incorpora sus hallazgos a fotografías, que luego combina con los objetos encontrados para crear sus instalaciones del tamaño de una habitación. En su serie Retratos de un Serialsammler, Brinkmann se fotografía a sí mismo vistiendo sus creativos conjuntos de chalecos de restos de tela, faldas plisadas a modo de capas y cascos de cubo de basura. En consonancia con su afinidad por la ocultación y la sorpresa, nunca muestra su rostro. Las imágenes conjugan lo tradicional y lo absurdo, ya que sus poses se inspiran en siglos de convenciones pictóricas occidentales del retrato de viejos maestros. Por ejemplo, una figura reclinada puede evocar la Venus de Urbino (1538) de Tiziano, pero Brinkmann nunca pretende reproducir la pintura exacta. En otra serie, studio blue ("flores de estudio"), organiza los objetos de segunda mano en elegantes bodegones que explotan tradiciones pictóricas como la Vanitas holandesa. Latas de pintura desgastadas, jarrones desconchados, una cadena de bicicleta y baratijas varias cobran nueva vida mediante una lúdica recombinación y reencuadre. En 2011, Thorsten Brinkmann recibió el Premio de Arte Finkenwerder, "concedido a artistas que han contribuido de forma extraordinaria al arte contemporáneo en Alemania". Vive y trabaja en Hamburgo.