Juego de 12 copas de champán Deborah Ehrlich de cristal simple, sopladas a mano en Suecia

Deborah Ehrlich es conocida por su cristalería de exquisita sencillez desde 1999, cuando lanzó su carrera con Takashimaya y Moss. Su obra figura en colecciones de todo el mundo, como March SF, E.R. Butler&Co., y Blue Hill en Stone Barns. De formación clásica como escultora, cada pieza es una unión de formas contemporáneas y técnicas tradicionales. Con su compromiso con la artesanía de la más alta calidad, su obra se reconoce al instante por su pureza y delicadeza. Diseñado en el Valle del Hudson, su cristal es fino como el papel, claro como el agua y absolutamente impecable. Soplado, tallado y pulido a mano por maestros artesanos en Suecia, la fuerza del cristal le permite superar los límites entre elegancia y fuerza. Sus muebles e instalaciones de luz están fabricados con increíble atención al detalle, utilizando técnicas tradicionales, por uno de los artesanos más cualificados de Estados Unidos. La calidad del trabajo habla por sí sola, y ha creado un público fiel durante más de 18 años. "Saber cuándo has encontrado una proporción perfectamente equilibrada no es un juego de adivinanzas", dice. "Es como buscar en la oscuridad el pomo de una puerta: cuando lo encuentras, el vacío se estructura. Está muy, muy claro que al encontrarlo, te estás aferrando a una pieza de arquitectura mucho mayor".