Mesa baja de madera con tapa de cristal

El ADN artístico de Gisela Simas se basa en una sutil inquietud, un espíritu lúdico latente y una gran experiencia con el diseño modernista brasileño. "Lo que expresamos no es más que la suma de innumerables experiencias. Mis creaciones se forman primero en mi corazón, luego se completan en mi mente, hasta que toman forma en la vida real. Son el resultado de los lugares en los que he estado y de las relaciones y encuentros personales que he tejido, impregnados por la ética y la estética de la belleza y la sostenibilidad", dice Gisela. La sostenibilidad también es una palabra clave en la trayectoria de esta diseñadora apasionada por Brasil. Ya sea en el humor elegante del "Bar Milan", que combina con maestría y técnica profundidad, amplitud y generosidad, en la funcionalidad innovadora y confortable de la mesa "Lucrécia", en la belleza natural de la "Lámpara Congonhas", o en la búsqueda de calidad y seguridad en los procesos con un equipo leal y veterano a su lado, Gisela sigue buscando valorizar el diseño brasileño, en sus diferentes manifestaciones, en el escenario mundial. También actúa como "principal" de su marca homónima, en constante expansión, y se mueve entre la emoción y la gestión. "La marca GSD nació audaz y sigue siéndolo, con el compromiso de dejar su legado: unir todos los puntos de la cadena de producción, desde la creación hasta la entrega, buscando y generando la felicidad, que representa para nosotros el verdadero concepto de éxito."