Escultura única de acero y madera sobre una mesa, forjada a mano y con pátina

En el estudio hay un lecho de carbón ardiente listo para transformar el metal inflexible en algo maleable. James DeMartis utiliza las mismas herramientas de herrería -fuego, martillo y yunque-, que "no han cambiado en miles de años", para facilitar sus diseños, que son cualquier cosa menos arcaicos. Sus diseños reflejan tradiciones y técnicas del pasado, pero su estilo es contemporáneo y poco ortodoxo. DeMartis hace esculturas de metal y transforma el metal (hierro, latón, bronce, acero inoxidable) también en objetos prácticos. Cambiando deliberadamente la naturaleza del metal, deconstruyéndolo, fundiéndolo y distorsionando sus propiedades, crea patrones y texturas que recuerdan a la naturaleza. Al utilizar estas técnicas, su obra parece delicada y ligera, con un "movimiento" visual que desmiente la solidez inherente a los materiales. Además de esculturas, el trabajo a medida de DeMartis consiste en lámparas de araña, barandillas, barras para cortinas, verjas, percheros, accesorios para chimeneas, bases para mesas, bodegas... Incorpora sus diseños a piezas funcionales. Al observar la belleza de la forma en artefactos y objetos sencillos y comunes, disfruta haciendo bases, soportes o escuadras que elevan, literalmente, el valor y la presentación de piezas corrientes hasta convertirlas en arte. Numerosos coleccionistas, diseñadores, arquitectos, propietarios de viviendas y contratistas han entablado relaciones duraderas con el Sr. DeMartis. Gracias a Joanne Pilgrim de The East Hampton Star por contribuir con el texto anterior parafraseado.