Con su estallido de "hojas" acrílicas iluminadas que emergen de un largo tronco metálico, el diseño kitsch de la lámpara de pie Sanremo de 1968 parece una palmera artificial barata. Esa irreverencia está en consonancia con el trabajo vanguardista de Archizoom Associati, un estudio formado en 1966 en Florencia junto con el auge del diseño radical italiano y otros colectivos como Superstudio, Ziggurat y UFO.

Los miembros de este movimiento -muchos de ellos recién licenciados en prestigiosas instituciones académicas italianas- adoptaron plenamente un estilo "antidiseño". Les encantaba experimentar con nuevos materiales, formas poco convencionales y colores vivos para muebles y objetos, al tiempo que desafiaban las normas de la arquitectura moderna con conceptos atrevidos para clubes nocturnos. La celebración de la cultura pop y la ironía por parte del movimiento fue una reacción a la crudeza del modernismo dominante en y a lo que los diseñadores radicales italianos consideraban un fomento del consumismo.

El prototipo de , el descarado follaje de imitación -llamado así por la ciudad costera italiana de Sanremo- fue ideado por el diseñador industrial Dario Bartolini (nacido en 1943) como regalo de compromiso para su compañera de Archizoom y prometida Lucia Morozzi. Además del ingenioso uso del plástico transparente para irradiar luz a través de sus hojas, el concepto inicial de la lámpara de pie Sanremo incluía un elemento sonoro que se asemejaba al chirrido del canto de un grillo. Aunque ese toque caprichoso no llegó a la versión producida por el fabricante italiano de muebles Poltronova, la lámpara de pie tiene un montón de florituras excéntricas, incluidas opciones de color de luz fluorescente roja, verde y azul, así como una base en blanco o negro.